Nuevo caso de hallazgo de plantas de marihuana en la provincia. La Guardia Civil ha imputado a un vecino de Torreblanca, de 32 años y nacionalidad española, al que han sorprendido con 68 plantas de cannabis en una finca de Alcalà. Una detención que se produce tras los últimos dos descubrimientos en Vila-real.

El cultivo hallado lo conformaban ejemplares de unos 90 centímetros de altura, distribuidos por una zona de la parcela y escondidos entre arbustos y pinos. Todas las plantas estaban alojadas en sus respectivos maceteros y tenían distintas fases de crecimiento. En la plantación los agentes hallaron sacos de tierra y garrafas de plástico, una pala y un líquido usado para favorecer el crecimiento de los ejemplares.

Los efectivos del instituto armado aprehendieron todas las plantas, las introdujeron en el vehículo policial e imputaron al dueño de la finca como supuesto autor de un delito contra la salud pública (cultivo de droga). Asimismo, las diligencias instruidas fueron entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Vinaròs.

Son multitud las operaciones contra las plantaciones de marihuana que tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil están llevando a cabo en la provincia en las últimas semanas.

Y el motivo no es otro que la época del año en la que nos encontramos. Septiembre es un mes en el que el cannabis experimenta su etapa de floración.

Las plantas están especialmente altas y desprenden un intenso olor. Es por ello que los ejemplares están más visibles y, en muchas ocasiones, son los propios vecinos o agentes en servicio de patrulla los que avistan las plantaciones en fincas o viviendas.

Benlloch, Vila-real, Castellón y Almassora son las últimas localidades en las que los efectivos han practicado registros domiciliarios, en busca de ejemplares. Y es que las tareas de vigilancia de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado se multiplican en esta época del año para luchar contra el cultivo de sustancias estupefacientes en la provincia. H