Un pirómano sembró ayer el caos en Almassora al incendiar hasta cinco vehículos y obligar a desalojar las dos escaleras de un mismo edificio. El primero de los fuegos comenzó a las 12.30 horas en un camión frigorífico estacionado en la calle San Jaime, a la altura de neumáticos Valero y la gasolinera BP.

Un par de minutos después, otro incendio se declaró en un tráiler contiguo y un tercer caso se producía, de manera escalonada, en un turismo aparcado en esa misma calle. Rápidamente se descartó que fueran llamas fortuitas. Los vecinos de una vivienda cercana vieron cómo el fuego comenzaba en una de las ruedas del coche en cuestión y, con un extintor, evitaron que el mismo se propagara. El autor empleó un acelerante en las gomas.

Los bomberos, la Policía Local y la Guardia Civil desplegaron un dispositivo y sospecharon desde el inicio que la mano del hombre estaba detrás. Y es que, además, hace 20 días, otros dos coches ardieron en las calles Hernán Cortés y San Fernando, a solo 300 metros de distancia. Un cuarto fuego afectó ayer a otro vehículo en la calle Juan de Austria, casi con Constitución, aunque solo quemó un neumático. Sobre las 15.20 horas, cuando las llamas de los camiones estaban ya extinguidas, otro incendio se declaró en un párking privado de un edificio en la calle Mª Rosa Martí, con 18 coches y tres ciclomotores en el interior del mismo. El fuego calcinó un vehículo y destrozaron las canalizaciones de agua y el sistema eléctrico. La intensa humareda obligó a desalojar a unos 40 vecinos de dos escaleras, de cuatro plantas cada una, y las labores de extinción duraron hasta las 20.10 horas.

Todo apunta a que el mismo delincuente que actuó por la mañana se coló, ya por la tarde, en el sótano del edificio y lo incendió.

La alcaldesa, Merche Galí, ha convocado para hoy a los mandos de la Guardia Civil y la Policía Local para analizar el operativo que logre detener al pirómano.