Una denuncia por violencia de género precipitó la detención de dos presuntos narcotraficantes en Castellón, que el próximo día 20 se sentarán en el banquillo de los acusados de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial.
J.L.E.G. y W.L.G., para quienes el Ministerio Público solicita nueve años de prisión y una multa de un millón de euros, se dedicaban, según la Fiscalía, a la preparación, transformación y distribución de cocaína en la provincia. El 28 de noviembre del 2016 el primero de ellos tuvo conocimiento de que había sido denunciado por un delito de malos tratos, por lo que, creyendo que las autoridades se personarían en su casa, procedió a desmantelar el laboratorio de cocaína que tenía instalado en su casa, en connivencia con el otro acusado.
El mismo comprendía tanto la existencia de sustancias estupefacientes y de corte, como instrumentos necesarios para el pesaje, la elaboración de la dosis y su distribución a terceras personas, según consta en el escrito de acusación de la Fiscalía Provincial.
Una vez desmantelado, J.L.E.G. se puso en contacto con W.L.G. y ambos acordaron guardar todo el material en un vehículo, que se hallaba estacionado en el garaje de la casa del segundo. Ese mismo día, tras ser localizado dicho coche por los agentes de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional, los agentes observaron por la ventana que había unos bultos sospechosos en el interior del turismo. Según relata el fiscal, allí se encontraban unas cajas de plástico transparente, tipo tupper, que contenían lo que parecían ser bloques de cocaína.
HALLAZGO DEL ALIJO //
El posterior análisis confirmó que se trataba de dicha sustancia y los agentes de la Policía Nacional de Castellón requisaron varios paquetes, con purezas de entre el 43 y el 80%, que en total alcanzaban los 2,7 kilos de cocaína.
Además, también intervinieron tres botellas de agua destilada, una prensa hidráulica, un cucharón, una balanza de cocina, una báscula de precisión, alambres, un colador y sustancias para adulterar la cocaína, tales como cafeína, fenacetina, levamisol, lidocaína, procaína y tertracaína.
La droga intervenida hubiera alcanzado en el mercado ilícito un valor de 276.434 euros de haber sido vendida. La Fiscalía acusa a los dos procesados de un delito agravado contra la salud pública y pide para ellos, además de los nueve años de cárcel, una multa de un millón de euros para cada uno de los procesados. El día 20 deberán responder por estos hechos ante el tribunal.
