La Guardia Civil ha detenido a una mujer de 40 años como supuesta autora de un delito de apropiación indebida, tras apoderarse de más de 70.000 euros en la empresa de Vinaròs para la que trabajaba, aprovechándose de sus responsabilidades contables en un hipermercado. La detención se produjo tras largas investigaciones llevadas a cabo por los agentes desde mediados del pasado mes de febrero. Fue el representante legal de la superficie comercial quien denunció la desaparición o sustracción de una gran suma de dinero, procedente de la caja de caudales de la empresa.

Los guardias civiles, tras efectuar numerosos análisis y estudios contables, unidos a otras gestiones de carácter más técnico, comprobaron cómo la ahora detenida aprovechaba su trabajo como responsable y administradora del dinero de dicho hipermercado. Al parecer, la sospechosa alteraba arqueos y datos contables desde hacía tiempo para que los servicios de supervisión de la empresa no se percataran de la sustracción del dinero.

Para ello, variaba datos que en ocasiones, incluso, hacía coincidir en fechas en las que ella no estaba para tener una coartada y desviar la atención de las investigaciones. Pese a sus esfuerzos por evitar la acción policial, los investigadores lograron desenmascararla y arrestarla. Tal y como dio a conocer ayer el instituto armado, la detenida ha pasado a disposición del juzgado de instrucción número 5 de Vinaròs.

Los investigadores detectan cada cierto tiempo casos en los que se aprovecha la condición de trabajador o directivo para cometer un delito. En muchos de los supuestos que trascienden, los delitos se cometen por parte de responsables de entidades bancarias. El último de ellos se dio a finales del 2018, cuando la Audiencia Provincial condenó a un exdirector de banco de Almassora por estafa a dos ancianos.

Le impuso 21 meses de cárcel, 1.470 euros de multa y la devolución de los 6.000 con los que se quedó de unos clientes. Los afectados tenían 82 y 85 años.