Un acusado de presunta estafa inmobiliaria en el alquiler de medio centenar de apartamentos en Vinaròs no se presentó ayer al juicio que debía celebrarse contra él en la Audiencia Provincial y fue puesto en búsqueda y captura. Los magistrados lo decidieron así para garantizar su presencia en la vista oral. La Fiscalía pide para él una pena de prisión de cinco años. Relata en su escrito de acusación que presuntamente el procesado pactó con dos empresarios en junio del 2012 el alquiler de 50 apartamentos por tiempo de cinco años. Acordaron que el primer ejercicio pagaría por cada inmueble 250 euros, cantidad que se iría incrementado anualmente hasta llegar a 450. Supuestamente, el acusado subarrendó los 50 apartamentos a terceros y no abonó a los dueños ni el precio del alquiler ni la fianza, causando un perjuicio de 531.000 euros.