Uno de los primeros juicios de este 2021 sentará en el banquillo a una vecina de Castelló por la tentativa de homicidio a su expareja sentimental. La acusada se enfrenta a una pena de prisión de nueve años y 10 meses por el apuñalamiento múltiple del hombre, a quien asestó en septiembre del 2018 varias cuchilladas potencialmente mortales en el cuello, el tórax, la espalda y el brazo.

La Fiscalía destaca en su escrito que sobre la mujer ya pesaba una orden de alejamiento que le prohibía acercarse a menos de 200 metros del varón o comunicarse con él. Según sostiene el Ministerio Público, el 19 de septiembre del 2018 la procesada acudió al domicilio de la víctima y se dirigió al hombre, que se encontraba en la cocina-comedor. Presuntamente, ella cogió un cuchillo de grandes dimensiones y le dijo: «He venido a matarte y te voy a matar».

Con ánimo de atentar contra la vida de su expareja, le asestó numerosas puñaladas. El hombre consiguió salir al balcón y gritar, pidiendo auxilio, hecho que provocó la huida de la acusada.

A consecuencia del apuñalamiento, la víctima sufrió múltiples heridas por arma blanca en la zona cervical anterior, dorsal, flanco derecho y en ambas muñecas. Asimismo, tuvo fracturas y, tras una primera asistencia del SAMU en el lugar de los hechos, fue trasladado de urgencia al Hospital General. Una vez en el centro castellonense se le practicó un TAC que evidenció graves lesiones. El varón necesitó tratamiento quirúrgico y, tras recibir el alta, tuvo que ser ingresado en otras dos ocasiones y recibir transfusiones de sangre por el agravamiento de la anemia causada por la pérdida de sangre tras el ataque.

Para su curación fueron necesarios 72 días, con 12 de ellos de ingreso hospitalario. El suceso le agravó la insuficiencia renal previa y le ha supuesto la pérdida de autonomía para las actividades diarias, así como varias cicatrices.

Las heridas del cuello, tórax y los dorsales no afectaron a órganos vitales de manera grave, pero por su cuantía y por el efecto del shock hipovolémico (pérdida de sangre por hemorragia), eran potencialmente mortales en caso de no haber recibido el herido ayuda médica inmediata.

Por todo ello, la mujer se enfrenta a un delito de tentativa de homicidio y otro de quebrantamiento. Además de la pena de cárcel, el fiscal solicita una indemnización de 14.440 euros para la víctima por las lesiones y las secuelas ocasionadas. Asimismo, el Ministerio Público pide que la procesada tenga una orden de alejamiento por la que no pueda acercarse a menos de 300 metros de la víctima por tiempo de 15 años. La vista comenzará el día 8 con la declaración de la agresora.