Morder a un policía de Almassora y quintuplicar la alcoholemia ‘cuesta’ 5.000 €

Un conductor reincidente, de nacionalidad venezolana y 40 años, ha sido condenado por delitos de atentado, lesiones leves y contra la seguridad vial por circular al volante con una tasa de alcoholemia que quintuplicaba el máximo permitido y morder, además, al policía que le dio el alto en Almassora. El Juzgado de lo Penal número 1 de Castellón le ha impuesto una multa de casi 5.000 euros y le ha retirado el carnet de conducir durante dos años y medio, según la sentencia a la que ha tenido acceso Mediterráneo.

El juicio por estos hechos se celebró hace escasos días en referencia a un suceso acontecido en diciembre del 2018 en la avenida Burriana de la localidad. Según declara probado la Justicia, sobre las 16.45 horas del día de los hechos el ya condenado circulaba por Almassora en zig-zag, a consecuencia del estado etílico en el que se encontraba y con el consiguiente riesgo para el resto de los usuarios de la vía pública.

Advertida tal circunstancia por una dotación policial, se le dio el alto, invitándole los agentes a realizar las pruebas de alcoholemia. El procesado se negó a salir del vehículo, aferrándose al volante, por lo que un policía local se dirigió hacia el vehículo, queriendo retirar las llaves del contacto. En ese momento, el sentenciado le mordió la mano al agente y le dio también una patada en la pierna.

Finalmente, el conductor accedió a salir del coche y realizar el test, que dio un resultado de 1,28 mg/l. El agente recibió asistencia sanitaria por la mordedura y una contusión, según la sentencia.

En el 2016 el mismo hombre ya había sido condenado por otro delito contra la seguridad vial a seis meses de multa y un año de retirada del carnet de conducir.