La pareja sentimental y la hija de la mujer hallada muerta, con signos de estrangulamiento, en el Paraje Natural Municipal del Clot de Burriana declararon ayer en dependencias de la Guardia Civil en relación al homicidio de Johana Andrea A.G., de 41 años y nacionalidad colombiana. La investigación de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial continúa por ahora su curso sin que se hayan producido detenciones y es que tanto la autoría, como el móvil del homicidio, siguen todavía muy abiertos.
Los integrantes del grupo de delitos contra las personas se centran en indagar acerca del entorno de la víctima, como es habitual en estos casos. Los familiares son los primeros a los que recurren los investigadores, pero también así las amistades o compañeros de trabajo, quienes está previsto que sean entrevistados en breve.
Según ha podido saber este diario de fuentes del entorno, Johana Andrea A.G. tenía una pareja estable, con quien compartía su vida desde hacía ya cerca de una década, y una hija de una relación anterior. La víctima llevaba afincada en España unos 20 años, donde también cuenta con una hermana, según explican algunas de sus amistades en conversaciones con este rotativo.
La víctima del último homicidio en la provincia había vivido en les Alqueries durante varios años y allí la noticia de su fallecimiento ha conmocionado a los vecinos del edificio que abandonó hace solo unos meses, a finales del 2020, tal y como publicó ayer este diario. Quienes compartieron escalera con ella la describen como una mujer «amable», «muy normal», «amante de los gatos» y se muestran impactados por el terrible final de Johana Andrea A.G..
Tras abandonar les Alqueries, la mujer se instaló en Burriana, donde vivía en la actualidad. Allí, la Policía Local había recibido recientemente algunos avisos por supuestos intentos de suicidio.
El caso ha despertado una gran preocupación entre los vecinos de la Plana Baixa --especialmente, entre las mujeres-- y por las redes sociales y WhatsApp se han reactivado bulos acerca de la presencia de un supuesto asesino en serie. Fuentes de la Guardia Civil lo desmienten e insisten en que no hay nada, por el momento, que relacione el homicidio de Burriana con los de Florina Gogos --la joven de 19 años que era prostituida en Silla y apareció sin vida en una acequia el pasado enero-- y Olga Pastor --la mujer de 43 años hallada en Massarrojos--. Por ahora, la única coincidencia entre las muertes de Johana, Florina y Olga es que fueron estranguladas y sus cuerpos, abandonados en áreas de cultivo —las dos últimas, arrojadas a sendas acequias—.
