Seis años y cinco meses de prisión es la pena que solicita la Fiscalía para un preso que intentó fugarse del Hospital General de Castellón en el que estaba ingresado en 2018. El interno --con un amplio historial delictivo al haber sido condenado por dos delitos de intento de homicidio, robo con violencia, atentado, tenencia ilícita de armas y delitos contra la seguridad vial-- llamó para que le cambiaran el gotero en la medianoche del 7 de abril del citado año. Cuando uno de los agentes que se encargaban de su custodia fue a la habitación para comprobar su estado y vio que el reo no estaba en su cama, entró en la habitación.
Según sostiene el fiscal, el acusado, con la intención de fugarse del centro hospitalario, salió sorpresivamente del cuarto de baño, portando en su mano una chapa doblada, que era una rejilla metálica arranca del servicio. El interno se dirigió, presuntamente, de forma violenta contra el agente, quien para evitar ser agredido con dicho objeto retrocedió y tuvo que tirarse al suelo de espaldas.
Las lesiones
En la caída, el efectivo se fracturó la cabeza del radio derecho y precisó, además de una primera asistencia, tratamiento ortopédico y rehabilitador consistente en la inmovilización mediante vendaje y cabestrillo, tal y como consta en el escrito de acusación provisional.
Un compañero del agente entró en la habitación e intentó deternar al preso, que ya no llevaba la rejilla metálica y pretendía fugarse. Al cortarle el paso, el reo intentó salir por la puerta de emergencia, pero el policía consiguió inmovilizarlo. El preso opuso resistencia y causó lesiones al agente en una mano.
Ante estos hechos, el Ministerio Fiscal considera al acusado autor de un delito de atentado en concurso ideal con otro de lesiones y un delito leve de lesiones en concurso medial con el de quebrantamiento de custodia en grado de tentativa. Pide la condena del procesado con la circunstancia agravante de reincidencia.
Además de las penas privativas de libertad, el fiscal pide una multa de 1395 euros. En el apartado de la responsabilidad civil, aboga por el pago de 11848 euros de indemnización al agente al que atacó por los días que tardó en sanar y sus secuelas. Para el otro policía solicita 460 euros.
El juicio será el próximo día 16 de junio en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Castellón y comenzará con la declaración del acusado.
Otra fuga, consumada
Un preso de la cárcel de Albocàsser consumó una fuga en febrero del 2020 durante una visita al Hospital General de Castellón. El reo, condenado por tres tentativas de homicidio tras participar en un tiroteo entre clanes en Alicante en 2013, dio una patada a uno de los agentes que lo custodiaban y huyó. Se entregó en una cárcel alicantina varios días después.
