Como adelantó ayer este diario en su edición digital, una narcolancha de grandes dimensiones apareció ayer abandonada en la zona de la torre Colomera, a escasos metros de la vía verde que une Benicàssim y Orpesa, concurrida de forma habitual por ciclistas, corredores y caminantes. La embarcación, cuyo valor podría superar el medio millón de euros según fuentes consultadas por este diario, habría sufrido en la noche del domingo al lunes algún fallo en el motor. Este hecho habría obligado a los tripulantes de la misma a abandonarla entre las rocas por miedo a ser pillados por las autoridades.
Al lugar se trasladaron, tras recibir el aviso, agentes de la Guardia Civil. Registraron en profundidad la goma y todos sus compartimentos, donde no se halló rastro alguno de droga. La ausencia de estupefacientes lleva a pensar que los traficantes pudieran haber lanzado los fardos al mar al ver que tenían problemas en el transporte. Sin embargo, también podrían haber alijado la sustancia en algún lugar de la costa. La Benemérita ha iniciado ya una investigación y los próximos días serán determinantes para intentar esclarecer lo ocurrido. Fuentes consultadas señalan que si los narcos lanzaron la droga al mar cerca de la costa castellonense, la sustancia puede emerger en 48 o 72 horas.
Efectivos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil también se desplazaron ayer a la zona a bordo de su patrullera para intentar remolcar la lancha. En las labores también participó una embarcación de menor tamaño del instituto armado. Al cierre de esta edición, aún no habían logrado desencallar y remolcar la narcolancha.
La Benemérita se incautó hace escasos días de casi 2.500 kilos de hachís en Vinaròs, el mayor alijo por vía marítima requisado en los últimos seis años en la provincia. Este no es, sin embargo, el único golpe policial reciente al narcotráfico marítimo en Castellón. No hace todavía dos meses que una intervención en l’Alcora logró desarticular una organización que operaba en todo el litoral mediterráneo. En el marco de la operación Hulkcos-Perseo-Orquesta, la Guardia Civil, la Agencia Tributaria y la Policía Nacional registraron naves industriales en la capital de l’Alcalatén, donde se incautaron, precisamente, de cinco narcolanchas de grandes dimensiones, además de camiones, furgonetas, combustible y equipos de navegación y de comunicaciones valorados en más de 1.500.000 euros.
Fuentes policiales aseguran que la presión ejercida en el Estrecho ha dado sus frutos y ha obligado a las organizaciones a reactivar otras rutas mediterráneas. Por otra parte, las organizaciones están cada vez más profesionalizadas e invierten grandes sumas de dinero en mejorar los sistemas de transportes para evitar la acción policial.
