La familia de Marta del Castillo, la joven sevillana asesinada por Miguel Carcaño el 24 de enero del 2009, ha pedido dos años de cárcel para Francisco Javier García Marín, alias el Cuco, y su madre por mentir en el juicio.

Los padres de la víctima, Antonio del Castillo y Eva Casanueva, también reclaman que los acusados paguen una multa de 1.800 euros y los indemnicen con 20.000 euros por daños morales, todo por un delito de falso testimonio por el que la Fiscalía ha pedido una condena de ocho meses de cárcel para el Cuco y su progenitora, Rosalía García Marín.

En su escrito de acusación, según han confirmado fuentes del caso a EFE, la familia de Marta también reclama que Carcaño, que está cumpliendo una condena de veintiún años y tres meses en la prisión de Herrera de la Mancha, declare como testigo.

El asesino confeso aseguró que el Cuco, que entonces era su amigo, estuvo la noche de los hechos en el domicilio de la calle León XIII donde Marta resultó mortalmente agredida.

La familia de la joven recuerda que el Cuco, su madre y su padre, este último fallecido hace cuatro años, comparecieron como testigos y "de común acuerdo, a sabiendas de su falsedad, con temerario desprecio hacia la verdad y con la intención de inducir a error al tribunal sobre los hechos objeto de enjuiciamiento", ofrecieron "datos falsos y realizaron manifestaciones falaces, mendaces y reticentes".

Según ellos, el Cuco no estuvo en el piso de Carcaño sino durmiendo en su casa, mientras que en la sentencia dictada por la Sección Séptima se establece como probado que sí acudió a León XIII y ayudó a su amigo a deshacerse del cuerpo de Marta.

Los padres coinciden en gran parte con la Fiscalía, que asegura en su escrito que el Cuco y sus familiares se "concertaron" para "dar cobertura" a su actuación en la madrugada del 24 de enero "a sabiendas de que se faltaba a la verdad" y sin importarles los perjuicios" que podían provocar a la familia de la víctima.

Así, la madre declaró al tribunal que había estado en un bar con su marido y que al volver a casa, sobre la 1.30 o las 2.00 de la madrugada, su hijo ya estaba "dormido en su habitación", pero "la realidad es que estuvieron en el establecimiento hasta las 4.30 y no encontraron a su hijo en casa cuando llegaron", replica el fiscal.

Su escrito provisional también rememora que el Juzgado de Menores número 3 de Sevilla condenó al Cuco a tres años de internamiento en régimen cerrado por un delito de encubrimiento.

Según esa sentencia, García Marín ayudó a Carcaño a deshacerse del cadáver de Marta y evitar su descubrimiento.

El Cuco, que acaba de cumplir 28 años, y su madre fueron procesados por el Juzgado de Instrucción número 2 de Sevilla a principios de 2019 y de nuevo a principios de mayo de este año.

En ambos autos insistió en que el Cuco, su madre y su padre "urdieron un plan" cuya "única finalidad" era "engañar al tribunal acerca de lo realmente acaecido" el día del crimen.

Tras cumplir la condena que le impuso el Juzgado de Menores, el Cuco se mudó a un pueblo de la región francesa de Provenza-Alpes-Costa Azul.