El pesquero Odyssey 227, abordado a 30 kilómetros de Fuerteventura por las fuerzas de seguridad en la madrugada del martes, transportaba 22,1 toneladas de hachís, el segundo mayor alijo de esta droga capturado por el Servicio de Vigilancia Aduanera en España en toda su historia.

Cuando asaltaron el barco, los equipos de Aduanas calcularon que este buque de bandera de Mongolia podría transportar en su bodega entre 10 y 15 toneladas de hachís.

La Agencia Tributaria ha precisado este miércoles en un comunicado que el volumen total de droga que se ha recuperado del pesquero asciende a 22.100 kilos, repartidos en 700 fardos.

En la operación fueron detenidos los cuatro tripulantes del barco: el patrón del pesquero, un ciudadano italiano, y tres marineros, nacionales de Senegal, que quedaron ayer a disposición judicial en Las Palmas de Gran Canaria.

La Policía, la Guardia Civil y Aduanas, los tres cuerpos que han colaborado en esta incautación, creen que el pesquero se dirigía rumbo sur en la nueva ruta de entrada del hachís a Europa: un enorme rodeo que comienza en la costa atlántica de Marruecos, sigue hacia Senegal o el Golfo de Guinea y regresa por tierra hacia el norte de África a través del Sahel para terminar en Libia.