Las Agujas de Santa Águeda, el Penyagolosa y la Serra d’Espadà constituyen las tres zonas donde más rescates de montaña tiene que realizar el Consorcio Provincial de Bomberos. Hasta el pasado 1 de junio, las brigadas llevaban realizados 43 rescates en el medio natural. Solo el domingo hubo tres.

Las Agujas

Javier Botet, jefe de las Unidades de Rescate, explica que en el caso de las Agujas, el motivo es que se trata de una zona cercana a Castellón, en la costa, y un recorrido bastante transitable y que llama mucho la atención a la gente. «Se desorientan entre el salto del Agulló y el trampolín, no ven el sitio, se meten en las losas muy inclinadas, cogen miedo y no pueden seguir», resume. 

El Penyagolosa

En el Penyagolosa, normalmente quien requiere ayuda son personas que van a hacer escalada deportiva y sufren un accidente en el mismo pico. 

La Serra d'Espadà

En cambio, en la Serra d’Espadà --al igual que en les Agulles-- los rescatados suelen ser caminantes no habituados a la montaña, que salen a dar una vuelta, se desorientan y piden ayuda. 

De hecho, los rescates de senderistas que no tienen una experiencia en la montaña acorde con lo que va a hacer se han disparado durante la pandemia, según precisa. 

Consejos para evitar un percance

Por eso da una serie de consejos para evitar sufrir un percance en la montaña. El primero, «la prevención, que empieza por uno mismo»: Estudiar la ruta, informarse de la meteorología, hablar con un allegado sobre qué se va a hacer y durante cuánto tiempo, para que dé la voz de alarma si, pasado el periodo, no tiene noticias, y llevar el material adecuado a lo que vamos a hacer. «No podemos ir a la montaña con chanclas y bermudas. Tengo que prever que aunque salga con sol en Castelló si me desplazo al Penyagolosa, por ejemplo, el tiempo puede cambiar radicalmente, por lo que debo llevar ropa de abrigo, por lo que pueda pasar», añade.

 También aconseja tener en cuenta si nuestras habilidades físicas o la situación meteorológica nos van a permitir hacer aquello que queremos. «Ropa y calzado adecuado, alimentación, agua, GPS...» son elementos claves. 

Y... ¿quién paga el rescate?

En caso de verse en apuros, se aconseja a avisar al 112 o al 085. A la hora de un accidente, este suele pagarlo la administración a menos que el rescatado tenga un seguro de montaña que le cubra la asistencia. Y es que, aunque la legislación autonómica (decreto 22/2014) contempla la posibilidad de repercusión de los costes en caso de comunicar o provocar actos negligentes o contrarios a las recomendaciones que provoque  la movilización necesaria de los recursos de los servicios esenciales de intervención o falsos avisos, no suele aplicarse.