Las estafas a través de las redes móviles de telefonía son una de las principales amenazas a las que se ve expuesta la ciudadanía de forma habitual en los últimos años. Los ciberdelincuentes han encontrado en los smartphones una excelente vía para intentar echar mano a las carteras ajenas de forma virtual, casi siempre aprovechando un exceso de confianza de los usuarios.
Son estos descuidos los que alimentan la últimas de las estafas detectadas en los teléfonos móviles de no pocos castellonenses, que han detectado con sorpresa como aparecía en sus pantallas una llamada perdida de un teléfono aparentemente normal. Y solo aparentemente, porque si uno se fija comprueba que sobra una cifra de lo que sería un número de teléfono normal en nuestro país, esto es, compuesto por nueve dígitos.
Si uno no está atento y cae en la tentación de devolver la llamada, el timo se ha consumado y la cuantía del mismo dependería de los segundos que se mantuviera en línea. Estamos ante lo que se llama el llama-cuelga o wangiri. El teléfono en cuestión es el +6629702575 y procede de Tailandia. El prefijo internacional de este país (0066 ó +66) facilita poder provocar la confusión a quien recibe esa llamada.
El método no es nuevo y la Guardia Civil ya hace algunos años que viene advirtiendo sobre este fraude, que anteriormente ya se utilizaba utilizando números de teléfono de tarificación especial de países como Albania o Ghana, aunque en esta ocasión la numeración tailandesa más similar a las cifras de nuestros números de móvil hace crecer el peligro de que se consume la estafa.
El llama-cuelga es un tipo de estafa que se realiza con llamadas que no da tiempo a contestar y quedan registradas como perdidas. Si las devuelves tratarán de entretenerte el máximo tiempo posible, con excusas que van desde un premio hasta una oferta de electricidad, gas o productos bancarios.
Cómo bloquear los teléfonos sospechosos
Si sufrimos el problema de llamadas reiteradas de estos números sospechosos de estar detrás de una estafa, la solución más efectiva es bloquearlos. Esto se puede hacer fácilmente en nuestro móvil. Si tenemos iPhone, en la aplicación Teléfono buscaremos esa llamada, pulsaremos al lado del número y marcaremos la opción Bloquear. Si tenemos Android, desde el mismo registro de llamadas, seleccionamos el número y marcamos la opción dentro del menú de tres puntos que nos da más opciones.
