La Policía Local de la Vall d'Uixó ha salvado de morir ahogado a un perro que había caído en una balsa del término municipal. Un rescate in extremis, pues cuando los agentes llegaron donde estaba el animal, presentaba claros signos de agotamiento. Gracias a su rápida intervención, ya está con su dueño, que asegura que se le había escapado de un finca en la misma localidad.

El retén de la policía recibió ayer la llamada de una persona que alertaba de que un perro parecía estar ahogándose en una caseta de campo, al lado de un camino rural. Una patrulla acudió al lugar indicado, donde los agentes no tardaron en comprobar que un dogo canario estaba dentro de una balsa tratando de mantenerse a flote. Al tratarse de un can clasificado como raza peligrosa, actuaron, en primera instancia, de acuerdo a los protocolos establecidos para estos casos: dieron aviso a la protectora de animales que se encarga de la gestión de las recogidas de ejemplares perdidos o abandonados en la localidad, y también pidieron la ayuda de los bomberos.

Los agentes de la Policía Local sabían que si esperaban a los expertos el perro habría muerto ahogado, por lo que utilizaron una manguera para sacarlo del agua. MEDITERRÁNEO

Pero la situación requería de una respuesta urgente. Desde la protectora movilizaron a una de las personas que realiza recogidas con el material necesario para hacer una captura sin riesgos, pero aseguró que no llegaría a la Vall hasta 50 minutos después. Los policías no lo dudaron, la vida del perro dependía de que actuaran rápido y lo hicieron. Buscaron en los alrededores algún elemento que les ayudara a sacarlo del agua de inmediato y con seguridad. Encontraron un trozo de tubo de riego por goteo y como el animal llevaba collar, lo engancharon y lo salvaron.

Los policías sacan al perro del interior de la balsa con la ayuda de un tubo de riego por goteo que encontraron en la zona. MEDITERRÁNEO

Una vez en tierra firme, el dogo canario seguía mostrando claros signos de extenuación. Los policías que lo rescataron están convencidos de que si hubieran esperado 10 o 15 minutos más, el animal habría sucumbido al cansancio y habría muerto.

Se desconoce cuánto tiempo llevaba dentro de la balsa, pero tras la inspección posterior, les confirmaron que tenía la mandíbula inferior con un evidente desgaste por haberla utilizado como único apoyo para no hundir la cabeza en el agua.

El ejemplar de dogo canario inmediatamente después de haber sido rescatado por la policía, presenta un evidente desgaste de la mandíbula inferior por tratar de salvarse. MEDITERRÁNEO

Cuando el personal de la protectora acudió al punto indicado por la Policía Local comprobaron que el perro llevaba chip, por lo que se pusieron en contacto con su propietario, un vecino de Moncofa que aseguró que se le había escapado de una finca que tiene en la Vall.

El incidente no se quedará solo en una de esas anécdotas sobre intervenciones policiales con final feliz. Como consecuencia de lo sucedido, se ha iniciado una investigación para exigir responsabilidades al dueño de la balsa, que no tenía ningún tipo de protección a pesar de estar tan cerca del camino, porque igual que esta vez ha sido un perro, podría haber caído dentro una persona.