El volumen de la música. Ese es, al parecer, el motivo que generó la discusión que derivó en que un hombre sacara una pistola en la plaza Isabel la Católica de Castelló y amenazara a los asistentes a un evento feminista. Lo explicó él mismo a los agentes de la Policía Local que acudieron al aviso, tras lo cual estos procedieron a identificarlo.

Según fuentes policiales, varias dotaciones acudieron al aviso por el altercado sobre las 22.05 horas, Los agentes hablaron con las pocas personas que había en esos momentos en la plaza y una de ellas se les acercó para comentar que, minutos antes, un hombre había sacado una pistola y había amenazado a los allí presentes.

Al parecer, el hombre decía que los actos que se estaban organizando en la plaza estaban originando molestias vecinales por el ruido, por lo que exigió que bajasen el volumen de la música.

Los allí presentes entregaron a los agentes una pistola de juguete que era la que había esgrimido esta persona, y explicaron que cuando vio que la gente se le echaba encima, salió huyendo junto a un menor, su hijo, en dirección a la calle San Félix.

Llamada del hombre

Mientras los agentes están recabando datos, el Centre Integral Municipal de Seguretat i Emergències (CIMSE) recibe una llamada de un varón que detalla que se encuentra en su domicilio y que tiene miedo de bajar a la calle, ya que está siendo amenazado debido a un incidente que ha protagonizado en la plaza Isabel la Católica. 

Los agentes averiguan que es el autor de las presuntas amenazas con el arma simulada y proceden a identificarlo y hacer diligencias a prevención por si los actos realizados constituyen un ilícito penal. En su declaración, reconoce que estaba con su hijo menor en la plaza y que el origen de la disputa es que pidió a los organizadores que bajaran la música, ya que estaban generando molestias por su excesivo volumen, y éstos le respondieron de forma descortés.

Según las mismas fuentes, el acto que se estaba desarrollando "tenía autorización municipal para realizarse". En concreto, eran unas jornadas sobre el feminismo, con charlas y eventos musicales, autorizadas desde las 10.00 horas hasta la medianoche. En el momento de la intervención policial había unas veinte personas y se respetaban la medidas de seguridad de prevención del coronavirus, explican desde la Policía Local de Castelló.