Efectivos de la Guardia Civil de la Comandancia de Valencia han intervenido un total de 450 pastillas de un kilogramo de cocaína cada una en el interior de un contenedor procedente de Brasil. Este contenedor llegó al puerto el pasado día 17, momento en el que los agentes, en una inspección rutinaria propia de su servicio, observaron que el precinto del mismo presentaba fuertes indicios de haber sido manipulado.
A la vista del lugar de procedencia de la mercancía declarada y de las anomalías descritas, se decidió establecer una vigilancia discreta sobre el contenedor ante la sospecha de que el mismo pudiera contener algún tipo de sustancia ilícita en su interior y que la misma fuese retirada por alguna persona relacionada con la actividad del puerto, dando la misma resultado negativo tras varios días de dispositivo, por lo que se procedió a la apertura e inspección.
Esta inspección dio como resultado la localización de 15 bolsas de deporte superpuestas sobre el resto de mercancía al inicio del contenedor, las cuales portaban en su interior pastillas de cocaína.
Este habitual método de ocultación en puertos comerciales, conocido como 'gancho perdido' o 'gancho ciego', consiste en la introducción de la mercancía ilícita en contenedores de carga legal, sin conocimiento del exportador ni del importador de la misma.
Para ello, se violenta o modifica el precinto del contenedor, para que en connivencia con personas que tengan acceso al mismo dentro de las instalaciones portuarias, estos procedan a su retirada, continuando el contenedor con su tránsito programado.
