Un agente de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que participó en la investigación del asesinato del concejal de IU en Llanes Javier Ardines ha afirmado este martes que "la línea sentimental se vio clara desde las primeras averiguaciones" en su entorno personal.

En la quinta sesión de la vista oral con jurado popular que se desarrolla en la Audiencia Provincial de Oviedo siguen declarando los agentes que participaron en la investigación del crimen cometido el 16 de agosto de 2018 en las inmediaciones de la vivienda del concejal en la parroquia llanisca de Belmonte de Pría.

Según ha relatado, se investigó el entorno sociolaboral y el vecinal, en los que no se halló "ningún indicio de criminalidad", por lo que a continuación se indagó en el entorno sentimental del Ardines.

"Vimos clara la línea de investigación desde las primeras averiguaciones" en este ámbito, ha dicho el agente, quien ha explicado que el punto de partida fue el audio que el presunto inductor, Pedro Nieva., grabó en diciembre de 2017 con su móvil en un restaurante para confirmar sus sospechas de la infidelidad de su esposa con el concejal, del que era amigo personal al ser sus respectivas mujeres primas segundas.

El miembro de la UCO ha asegurado que el asesinato fue planificado el 27 de julio de 2018, día en que Pedro Nieva y el supuesto intermediario, Jesús M., se desplazaron a Belmonte de Pría junto al argelino Djilali B. para darle instrucciones sobre los horarios y las costumbres de Ardines para cometer el crimen junto con su compatriota y también acusado Maamar K.