Caso Abierto - El Periódico Mediterráneo

Caso Abierto - El Periódico Mediterráneo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

la policía nacional lleva a cabo la operación

Arrestan al dueño de varios kebabs por explotación laboral en Castellón

Investigan al gerente de seis locales en la provincia que carecían de licencias

Un furgón policial accede a la Ciudad de la Justicia de Castellón.

Un ciudadano pakistaní de 46 años y con residencia de larga duración ha sido detenido por agentes de la Policía Nacional de Castellón, acusado de un delito contra los derechos de los trabajadores. Se trata de un hostelero que, según las investigaciones, regenta hasta seis kebabs en la provincia (tres de ellos en Castelló, dos en el Grau y otro en Orpesa), unos negocios que, además, incurrirían en importantes infracciones al no tener las licencias necesarias para ejercer la actividad ni tampoco para tener instaladas terrazas en la vía pública.

Según ha podido saber este diario, agentes policiales, en colaboración con la Inspección de Trabajo, han llevado a cabo una operación que ha finalizado con la detención del presunto responsable de los establecimientos, quien ya cuenta con antecedentes por delitos de similares características y sobre quien decidirá la Justicia.

Dormían en el bar

Al parecer, el hostelero pakistaní tenía a trabajadores en condiciones infrahumanas, a los que hacía dormir en colchones tirados en el suelo, dentro de los propios bares, según han explicado fuentes del caso a este diario. Algunos de estos empleados, además de no estar dados de alta en la Seguridad Social, percibían una remuneración irrisoria y en mano --podían ser 10 o 15 euros al día--.

Uno de los propietarios de los locales utilizados por el hostelero pakistaní denunció el impago del alquiler ante las autoridades. Estuvo, al parecer, un año y medio sin percibir la renta por su establecimiento del Paseo Ribalta. Entre otras muchas gestiones, presentó un escrito en el Registro de Entrada del Ayuntamiento de Castelló y avisó a la Policía Local. Cuando los agentes municipales se personaron en el restaurante, los camareros salieron literalmente corriendo y abandonaron el kebab, dejándose incluso el fuego encendido, según ha podido saber este diario. Fueron los propios policías quienes lo apagaron y cerraron la persiana del negocio, que había quedado desierto en unos segundos.

Sin embargo, tras este suceso el negocio de comida árabe continuó abriendo al público.

Tras interponer el propietario del citado local una demanda civil, el Juzgado de Primera Instancia número 1 de Castelló ha dictado un decreto en el que dispone el desahucio del establecimiento del Paseo Ribalta, además del pago de 4.085 euros, más las rentas debidas que se devenguen desde a presentación de la demanda hasta la entrega de la posesión de la finca.

Será el próximo viernes, día 19, a las 11.00 horas cuando se llevé a cabo el lanzamiento y el dueño pueda recuperar su local.

Compartir el artículo

stats