Actuación de riesgo en la A-23, donde un camión que transportaba 33.000 litros de gasoil volcó y se incendió. Tanto fue así que las autoridades del Puesto de Mando Avanzado pidieron al alcalde de Soneja el confinamiento de los vecinos, a quienes se les prohibió salir de sus domicilios, así como también abrir las ventanas de sus inmuebles debido a la nube tóxica generada.

El vuelco tuvo lugar sobre las 16.00 horas y, al cierre de esta edición, la circulación en la autovía todavía estaba afectada. Por su parte, el conductor del tráiler accidentado, de 60 años, fue asistido por el SAMU por heridas de carácter leve, según informaron desde el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU). Por fortuna, el camionero pudo salir de la cabina antes de que esta se convirtiera en una bola de fuego y fue trasladado al Hospital Mini Fe de Sagunto para ser reconocido, aunque su estado no era gravedad.

Aunque en un principio las llamas afectaban solo a la cabeza tractora del camión, el fuego avanzó después por el resto del vehículo, complicando la situación y las tareas de extinción.

Actuación de los bomberos en la extinción de las llamas. SIAB

Cuatro dotaciones de bomberos del Consorcio Provincial, además de tres unidades de efectivos forestales de la Generalitat y guardias civiles de Tráfico actuaron en el espectacular dispositivo y aseguraron la zona, ya que la mercancía del tráiler era peligrosa. Por ello, hubo que cortar la circulación en ambos sentidos a la altura de Soneja --la población más cercana al punto del siniestro vial-- y se aplicó el plan especial de transporte en situación 1 y nivel 4.

Al lugar se desplazó un vehículo de riesgo químico, además de un camión nodriza con 35.000 litros de capacidad para abastecer de agua a los efectivos.

Los agentes de la Benemérita desviaron el tráfico y las retenciones se prolongaron hasta Altura, según fuentes del instituto armado consultadas. La columna de humo negro podía apreciarse a varios kilómetros de distancia en el Alto Palancia y el fuego también afectó a una zona de vegetación anexa a la autovía Mudéjar.

Las autoridades informaron, además, de la importancia de no aproximarse a caminos rurales o pistas colindantes. Asimismo, recomendaron no utilizar sistemas de ventilación ni calefacción.

Cerca de la medianoche ha quedado desmovilizado el operativo, tras retirar el tráiler de la calzada, aunque los dos carriles de un sentido de la autovía permanecen cortados al tráfico, pues, previsiblemente, será necesario reasfaltar el tramo, ya que ahora mismo es intransitable.