Tragedia en Llucena. Dos vecinos han perdido la vida mientras dormían en su domicilio, a causa de una supuesta intoxicación por monóxido de carbono. Aunque la investigación no ha finalizado y deberá ser la autopsia la que determine las causas exactas del óbito, todo apunta a que podría haberse producido una inhalación mortal a causa de la mala combustión de un brasero ubicado en el dormitorio y a la de falta de ventilación.
La consternación fue absoluta el martes por la noche en la localidad cuando se conocieron los fallecimientos. Según ha podido saber este diario, José Luis y Celedonia no tuvieron contacto con sus allegados en la jornada del martes, un hecho que extrañó a las familias porque era el cumpleaños de la hermana del fallecido. Preocupada por no saber nada de ellos ni haber recibido una felicitación, alertó a su otro hermano.
El Ayuntamiento ha decretado dos días de luto oficial por la muerte accidental de los dos vecinos y ha trasladado su pésame a los familiares. A través de un comunicado oficial, ha anunciado también que las banderas ondearán a media asta en el consistorio.
El descubrimiento
Con las llaves que la familia tenía de la casa --en la zona de Mas del Batlle, a la salida de Llucena y en dirección a Villahermosa-- se dirigieron hacia allí y encontraron los cuerpos sin vida de la pareja. Medios sanitarios acudieron al domicilio, pero solo pudieron confirmar sendas muertes. La Guardia Civil --concretamente, la Unidad Territorial de la Policía Judicial de Vinaròs-- se ha hecho cargo de la investigación del caso, aunque todo parece apuntar a una muerte accidental.
El hombre era muy conocido en la localidad y trabajaba como bombero forestal de una brigada de refuerzo en periodos estivales.
El primer edil, David Monferrer, lamentó lo ocurrido en declaraciones a este periódico y trasladó sus condolencias a los familiares y amigos de las víctimas ante tan trágica pérdida.
Cinco muertes este año
En lo que va de año cinco personas han perdido ya la vida en la provincia por incendios en viviendas o inhalación de humo. A los fallecidos en Llucena hay que sumar otra víctima el pasado mes de septiembre en Benicàssim. La mujer resultó herida en el espectacular fuego de su vivienda, en la sexta altura del número 74 de la avenida Barcelona, y aunque fue evacuada al Hospital La Fe de València, no pudo superar las graves lesiones.
A principios de año dos ancianos perdieron la vida en sendos incendios nocturnos en una masía de la Ribera de Cabanes --el finado fue un varón de 80 años-- y en una casa de Torreblanca --otro hombre, de 89-- con escasos días de diferencia. En el segundo caso una mujer tuvo que ser también atendida por inhalación de humo y un bombero sufrió un síncope.