Un hombre de 39 años falleció ayer por la noche en Burriana por un ataque al corazón después de que las autoridades intentarán mediar con él por causar molestias vecinales. A pesar de que los servicios sanitarios también acudieron hasta el lugar de los hechos nada pudieron hacer por reanimar a la víctima, que era vecino de la localidad.

Alrededor de las 3.15 horas de la madrugada del miércoles entró un aviso por emergencias en el que se requería asistencia sanitaria y policía local debido a fuertes ruidos en la calle Pizarro. Hasta el lugar de los hechos acudieron agentes de la Policía Local y Guardia Civil para intentar mediar y solucionar las molestias que estaba provocando un varón en importante estado de excitación. Para intentar calmarle, los servicios sanitarios intervinieron y, en esos momentos, el hombre entró en parada cardiorrespiratoria y terminó falleciendo.

Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación.