Preocupación por la desaparición de un chico de 28 años del que no se tiene noticias desde el pasado 6 de enero. Se trata de Sebastián Freire, un joven que es de origen colombiano y estaba afincado en Madrid, pero que como último rastro dejó el mensaje a su padre de que estaba de camino a Castellón, donde aseguraba que le habían ofrecido un trabajo en el sector hostelero.

La noticia la ha sacado a la luz el medio de comunicación radiofónico W, uno de los más potentes del panorama periodístico en Colombia, y el cual ha tenido acceso a las declaraciones del padre del desaparecido.

El progenitor del desaparecido ha explicado que: “Mi hijo se iba a mudar el 6 de enero porque le habían ofrecido un trabajo de camarero en un bar de Castellón”. Sin embargo, al perder la comunicación con Sebastián, empezó a preocuparse, "entré a su habitación vi su teléfono y su documentación. Fui a la Policía a hacer la denuncia y hasta hoy sigo sin saber nada de él”.

Problemas por la pandemia

El padre de Sebastián Freire también ha revelado en los micrófono de la radio W, que su hijo estaba ansioso por la situación que estaba viviendo por la pandemia. Con el confinamiento por el COVID-19 y el cierre de la hostelería había sufrido mucho.

Su angustiado padre afirma que "aunque había accedido a ayudas del Gobierno, estuvo a punto de sufrir el llamado síndrome de la cabaña por las cuarentenas, lo había alentado a buscar otro empleo y por eso decidió mudarse a Castellón".

El síndrome de la cabaña, también fiebre de la cabaña, se refiere a la angustiosa irritabilidad o inquietud claustrofóbica que se experimenta cuando una persona o un grupo queda atrapado en un lugar aislado o en un lugar cerrado, durante un período prolongado de tiempo, ​ sintiéndose como en una «prisión».