Uno de los doce fugitivos británicos cuyos rostros fueron difundidos el miércoles en España ha caído. Se trata de Joshua Hendry, a quien las autoridades británicas situaban en la Costa del Sol junto a otros cinco criminales. No se han equivocado con Hendry, cuya ficha detallaba que podría estar en Canarias o en Estepona, pero finalmente ha sido localizado muy cerca de este último municipio, en San Pedro Alcántara (Marbella), donde agentes de la Policía Nacional lo localizaron el jueves apenas veinticuatro horas después de haber visto las imágenes de la campaña.

Los investigadores, que trabajaban en su localización tras recibir una serie de informaciones, observaron a un hombre en la calle que paseaba a su perro y cuyas características coincidían con el prófugo. Tras varias comprobaciones, confirmaron su identidad y lo arrestaron.

Hendry, de 30 años, estaba reclamado por su presunta pertenencia a un grupo de narcotraficantes de Liverpool. Los investigadores británicos alegan que traficaba con heroína y crack junto a su madre y hermano, ya condenados, entre Liverpool a Grimsby. También tiene pendiente una condena de 10 años de prisión por hechos de la misma naturaleza. 

La campaña fue presentada el miércoles en Madrid por el secretario de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior, Rafael Pérez, la ministra consejera de la embajada británica, Sarah Cowley, el director general de Operaciones de la Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) británica, Steve Rodhouse, y el consejero delegado de la organización benéfica Crimestoppers, entidad que periódicamente lanza la conocida como operación Captura para localizar a criminales británicos que podrían refugiarse en nuestro país. En la presentación destacó el hecho de que la mitad de la nueva lista de los más buscados pudieran estar en el litoral malagueño. "Se sienten cómodos mezclándose con la comunidad de británicos", apuntó Steve Rodhouse antes de añadir la posibilidad de que sigan delinquiendo en territorio español.

Además de a Joshua Hendry, las autoridades británicas creen que otros cinco prófugos podrían estar en el litoral malagueño, dos acusados de asesinato (Callum Halpin y Nana Oppong) y otros tres por asuntos de drogas (Jack Mayle, Callum Michael Allan y Asim Naveed).

Las autoridades piden que cualquier información relacionada con los once fugitivos restantes se canalice a través de CrimeStoppers, que tiene un teléfono anónimo y gratuito (900 926 111), donde cuentan con la posibilidad de ser atendidos en español.