Tras cinco meses de investigaciones el área de Investigación de la Guardia Civil de Bétera, en colaboración con agentes de la Guardia Civil de Llíria, han desmantelado una banda organizada dedicada a los robos mediante el procedimiento del alunizaje con vehículos de gran cilindrada previamente sustraídos. Se les imputan más de 50 hechos delictivos cometidos en València, Alfafar, Catarroja, Riba-roja, Moncada y Nàquera, entre otros municipios. También se investiga su participación en otros robos cometidos en la provincia de Castelló, cuyos responsables fueron bautizados como la banda del Porsche, aunque en principio se trataría de una organización delictiva diferente.
Por el momento hay siete miembros de dicha organización detenidos, tres de los cuales ya han ingresado en prisión provisional, según han indicado fuentes jurídicas.
Sus objetivos eran desde tiendas de telefonía, estancos y perfumerías en núcleos urbanos, a empresas de todo tipo en polígonos industriales. Siempre con el mismo modus operandi, el alunizaje de coches robados de los que posteriormente abandonaban, en ocasiones tras prenderles fuego para eliminar posibles vestigios de sus delitos. De esta forma se habrían apoderado de un botín que ronda el millón y medio de euros entre dinero en efectivo y efectos sustraídos.
Robaron una treintena de cachorros en un criadero
Dicha banda había generado una gran inseguridad entre comerciantes y empresas de polígonos industriales de la provincia llegando a cometer hasta seis robos en una misma noche. El pasado 24 de enero desvalijaron con un BMW ranchera robado en València - que apareció quemado en Moncada - una tienda de telefonía de Xàtiva, un estanco de Casinos y después asaltaron varias naves en Nàquera. Entre ellos un criadero de perros en el polígono Los Vientos, donde se llevaron cerca de una treintena de cachorros.
Una semana después volvieron a actuar en este mismo polígono industrial de Nàquera, donde entraron en una empresa de ropa y productos deportivos, donde ya habían robado la semana anterior. En total se apoderaron de un botín próximo a los 250.000 euros en ambos asaltos.
Los arrestados, de nacionalidad española, son vecinos de Paterna, Benimàmet y Burjassot. Se les imputan los delitos de pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales, falsificación de placas de matrícula, amenazas y numerosos robos con fuerza. Lo siete detenidos fueron puestos a disposición judicial el pasado viernes en distintos juzgados; en Llíria, Paterna, Moncada y València, aunque las investigaciones han sido coordinadas por el Juzgado de Instrucción número dos de Llíria. El Juzgado de Instrucción número cinco de Llíria y el Juzgado de Instrucción tres de Paterna acordaron el ingreso en prisión provisional de tres de ellos, indicaron estas mismas fuentes.
El último golpe que se les imputa se produjo el pasado 14 de febrero. Esa madrugada robaron 30.000 euros en telefonía móvil tras una alunizaje en Benimàmet, donde incluso se encararon con un vecino que les estaba grabando y les recriminó su acción. Posteriormente también robaron en una tienda de bebidas esa misma noche.
Las investigaciones, que han permitido esclarecer más de 50 hechos delictivos, continúan abiertas y no se descartan nuevas detenciones.
