Un delito contra la libertad sexual cada tres días en Castellón. Es el estremecedor dato que arrojan las estadísticas del Ministerio del Interior, que cifran en 254 los casos registrados durante el pasado año en la provincia, un 53% más que en el año 2020. Además, este incremento supera ampliamente la subida autonómica, que se queda en el 40%, por lo que la alarma ha llegado al Gobierno y a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad. Tanto es así, que la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, ha tildado de «muy preocupante» la situación y ha decidido establecer un calendario de reuniones con diferentes expertos en la materia para abordar la actual situación.
El incremento de las agresiones sexuales se encuentra de máxima actualidad tras los casos vividos en Vila-real y Burjassot. Como ya informara este diario, una joven de 18 años fue atacada en las pasadas fiestas de Sant Pasqual por al menos cuatro menores de edad --siendo uno inimputable por tener menos de 14 años--. Tres de los implicados quedaron en libertad con cargos tras pasar a disposición judicial, mientras que el cuarto está exento de responsabilidad penal por su corta edad.
En el caso de la localidad valenciana, cinco menores de entre 15 y 17 años detenidos por la presunta violación grupal de una niña de 13 y la agresión sexual a otra de 12, ocurrida el pasado 16 de mayo en una casa abandonada.
«Los últimos casos vividos en Burjassot y Vila-real no son aislados. Las estadísticas hablan de un incremento que tenemos que estudiar en profundidad para implementar planes de prevención», ha puntualizado Calero.
Por su parte, la Policía Nacional y la Guardia Civil coinciden en prestar especial atención al incremento de agresiones entre los menores de 16 años por las consecuencias vitales que estos hechos comportan. En los casos denunciados, aseveran, se percibe «un patrón de actuación que podría estar relacionado con el acceso a contenido pornográfico en edades tempranas», así como con el «bombardeo mediático al que se exponen los jóvenes en redes sociales en los que se banaliza la violencia y el sexo».
Al reciente caso de Vila-real hay que sumar la violación en grupo en la Magdalena 2019 a una niña de 14 años recién cumplidos --tres implicados menores y un adulto fueron condenados--. En Burriana, en la madrugada del 1 de enero del 2019 dos jóvenes también violaron y retuvieron a una chica que regresaba a casa.
