Un policía local de Picassent resultó herido el sábado por la tarde al intervenir en una pelea ocurrida entre varios jóvenes. Durante su actuación, el agente acabó con una fractura en una pierna y tuvo que ser evacuado en ambulancia hasta un hospital donde el domingo aún permanecía ingresado, tal como han indicado fuentes municipales. 

La reyerta, en la que también actuó la Guardia Civil, ocurrió durante una de las celebraciones de bous al carrer que Picassent vive estos días con motivo de las fiestas de Sant Cristòfor Màrtir, patrón de la localidad. En concreto, el suceso tuvo lugar durante la eixida de bous programada para las ocho de la tarde del sábado, acto que finalmente fue suspendido por el consistorio debido a la violenta agresión protagonizada por varios jóvenes y el estado del agente herido.

Todo ocurrió en torno a las 20.30 horas. Un grupo de jóvenes de la localidad y otro llegado desde Alcàsser, aunque algunas fuentes señalan que «no sólo eran de Alcàsser, sino de diferentes municipios cercanos», se enzarzaron en una pelea por motivos que no han trascendido. Los participantes en la reyerta comenzaron a agredirse mutuamente a puñetazos, patadas y violentos empujones.

Respuesta inmediata

Inmediatamente, los agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil que se encontraban vigilando la celebración taurina acudieron a mediar en la pelea e intentar separar a los contendientes, aunque resultó que el primer agente municipal que llegó al lugar acabó tirado en la calle y con una pierna fracturada. Entre todos los efectivos de seguridad, que se ayudaron de las defensas personales que portaban, consiguieron detener la pelea y dispersar a los participantes. 

Suspensión de los festejos

Mientras, el agente herido fue inmediatamente trasladado en ambulancia hasta un centro hospitalario, donde continúa ingresado, y el Ayuntamiento de Picassent decidió suspender la celebración. Hoy ha emitido un comunicado condenando los hechos ocurridos y agradeciendo el trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad.

La alcaldesa de Picassent, la socialista Conxa García, ha condenado también los hechos ocurridos el sábado y ha señalado que «la violencia no tiene cabida en las fiestas de este pueblo, en ninguna de sus manifestaciones», al tiempo que ha pedido poder continuar con los festejos «en paz y armonía, como siempre debería ser».