La Audiencia Provincial empezó a seleccionar el pasado viernes a los miembros del jurado popular que, desde mañana, analizarán el suicidio de un menor de edad en Vila-real. En el banquillo se sentará el adulto, de 62, que lo hostigó de forma continuada tras haber tenido ambos un contacto sexual en un chat gay. Como avanzara este diario, la Fiscalía solicita 12 años de prisión por un presunto delito de homicidio en un caso que reabre el debate de la gravedad de los delitos por internet y que puede sentar un precedente en la provincia de Castellón.

El adolescente, que tenía 17 años, llegó a recibir más de un centenar de mensajes del procesado en un intervalo de tan solo siete horas, con ánimo de amedrentarlo. Al parecer, el adulto y el menor podrían haber tenido algún tipo de contacto de tipo sexual a través del teléfono, por lo que el investigado comenzó a escribirle, diciéndole: «Tengo toda la conversación en el móvil y lo voy a publicar con tu número», «saltarás de alegría cuando todo esto salga a la luz» o «te voy a enseñar a no fastidiar y a no hacer perder el tiempo a los que nos dedicamos a esto».

El fiscal relata en su escrito que el adulto, sabedor de la angustia y desasosiego que estaba causando en el menor, hasta el extremo de querer quitarse la vida, y aceptando conscientemente que el adolescente acabara suicidándose como le había anunciado, contininuó mandándole mensajes. «Tú te metiste en este problema y lo vas a pagar», le dijo el adulto al joven, siguiendo con expresiones tales como «si te suicidas les dejarás el marrón a tus padres y mi abogado leerá tu conversación conmigo delante de ellos» o «por meterte en una página para mayores voy a tu familia», tal y como consta en el escrito provisional de Fiscalía.

El menor ya fallecido le pidió reiteradas disculpas al procesado, sin embargo este no dejó de dirigirle frases como: «Te pondré una demanda y tendrás que venir acompañado de tus padres», «cuando se hace esto es para follar, así que atente a las consecuencias» y «¿si yo te hiciera ahora chantaje, qué harías?. 

Según sostiene el fiscal en su escrito, incluso después de haberse quitado la vida, el acusado siguió enviando mensajes similares a los anteriores e incluso fotografías simulando haberle denunciado en la Ciudad de la Justicia de Castellón. Además de la pena de 12 años de cárcel, la Fiscalía propone que indemnice al padre y a la madre del menor fallecido en la cantidad de 73.000 euros a cada uno y al hermano con 27.000 más.

El acoso escolar se cobra alrededor de 200.000 suicidios al año, según un informe de la OMS junto a Naciones Unidas. El chantaje sexual también comporta episodios de ansiedad, acoso y depresión.