La Policía Nacional informó este martes de la detención de un hombre y una mujer como presuntos autores del robo que se cometió en octubre en la bodega del restaurante Atrio, de donde se llevaron 45 botellas que se valoraron en 1.648.500 euros. El arresto se produjo en Croacia, en un puesto fronterizo con Montenegro, y las botellas no se han recuperado. En la operación policial han participado, junto a los agentes españoles, la oficina de Interpol, Sirene y Europol y la comisaría de Gruda, en el país balcánico, además de las agregadurías de Interior que España tiene en Rumanía y en Países Bajos, según informó la Policía Nacional en una nota de prensa.

En la misma se detalla que fruto de la investigación realizada se pudo constatar que la mujer se alojó en el hotel de Atrio formalizando la reserva mediante un documento falso suizo. Tras cenar en el restaurante junto a su cómplice, ambos visitaron la bodega del restaurante invitados por el personal, una práctica totalmente habitual con los clientes. 

Tras ello la pareja subió a la habitación y, momentos después, el hombre abandonó la estancia para dirigirse al sótano donde se encuentra la bodega. Tras acceder con una llave maestra, que previamente había sustraído, salió con tres grandes mochilas -una en cada mano y otra a la espalda- donde había introducido las botellas.

Para su protección dentro de las mochilas se utilizaron varias toallas de la habitación donde estaban hospedados. Mientras el hombre accedía a la bodega del restaurante, la mujer distraía al empleado que estaba de guardia en la recepción con la excusa de que le preparase algo de comer a pesar de que la cocina ya estaba cerrada. El robo fue descubierto a la mañana siguiente, constatando que los presuntos autores habían abandonado el hotel sobre las 5.30 horas de la mañana. 

Las botellas, una de ellas valoradas en 310.000 euros, no se habrían recuperado, según informaron a este diario fuentes consultadas, que indicaron que por las características de la operación de los dos autores de la sustracción se trataría de «un robo por encargo». Este miércoles la delegada del Gobierno en Extremadura informará en Cáceres de todos los detalles de la operación policial. 

Según los datos avanzados este martes por la Policía Nacional, tras numerosas gestiones, tanto en España como en otros países, los agentes lograron identificar a los dos presuntos autores y constataron que ambos contaban «con una gran profesionalidad, especialización y perfecta planificación del robo». Además «se pudo comprobar que visitaron tres veces el restaurante antes del robo para hacer un estudio previo del lugar». 

La localización de ambos tras cometer el robo «también fue dificultosa», según la policía, ya que pocos días después del robo abandonaron España y «su alta movilidad e itinerancia» ha impedido conocer su paradero exacto hasta que, finalmente, fueron localizados entrando en Croacia desde Montenegro por el puesto fronterizo de Karasovi Sutorina. Allí fueron detenidos gracias a la cooperación internacional. En el momento del arresto, el varón tenía vigentes otras dos órdenes de detención emitidas por juzgados con sede en Madrid.

José Polo, copropietario del restaurante, mostró este martes su satisfacción por el resultado de la operación policial. Se encontraba en Burgos y se enteró por los medios de información del resultado de la operación, que se difundió por la tarde en un tweet, posteriormente se lanzó la nota de prensa con más detalles. Polo comentó que no tenían claro si finalmente los iban a poder detener y calificó de éxito la intervención de los agentes de policía. Los propietarios del restaurante, con dos estrellas Michelín, cobraron una indemnización por la pérdida de estas botellas tras llegar a un acuerdo con su compañía aseguradora. 

Los gerentes del hotel Atrio, José Polo y Toño Perez, han sostenido siempre que dicho robo fue "por encargo". De las 45 botellas sustraídas, 38 eran Romanée Conti, además de "la gran protagonista" de la bodega, el Chateau d´Yquem de 1806, de 310.000 euros. Hace más de dos décadas, Polo y Pérez consiguieron hacerse con esa histórica botella, "que ha visto -afirmaron- el devenir de los 215 años más recientes de la historia de Europa", en una subasta en Christie's en el año 2000.