Una joven de 18 años denunció de forma falsa que había sido secuestrada y violada en Palma. Se trataba así de justificar su ausencia del domicilio familiar. La Policía Nacional averiguó que los hechos que narró eran ficticios y la ha detenido por simulación de delito.
Tras recibir una denuncia de que un hombre, supuestamente, había cogido a una joven, la había metido por la fuerza en un coche para secuestrarla varios días y haberla violado. Investigadores de la Unidad de Familia y Mujer (Ufam) de la Policía Nacional se encargaron del caso.
En primera instancia, la chica fue trasladada a un centro hospitalario por una patrulla de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional. Posteriormente, fue conducida a la Comisaría para interponer la correspondiente denuncia.
Ante la extrema gravedad de los hechos denunciados, los investigadores de la Ufam intensificaron las pesquisas para el total esclarecimiento de los hechos. Finalmente, las indagaciones determinaron que todo se había tratado de una simulación para que la familia de la joven no le regañara por ausentarse varios días del domicilio sin dar explicaciones.
A continuación, los policías detuvieron a la joven como presunta autora de un hecho delictivo de simulación de delito. Tras tomarle declaración, quedó en libertad con cargos.
La simulación de delito es en sí misma una infracción penal. De hecho, descubrir a los impostores es una prioridad para la Policía. Cada hora que se dedica a estas pesquisas se quita de investigar un delito real. En muchos casos, estas denuncias falsas generan una gran alarma social.
Por ese motivo, la Policía Nacional cuenta con especialistas en la detección de estas denuncias ficticias. También existe el programa informático Veripol, que alerta con una fiabilidad del 90% cuando una denuncia puede ser ficticia.
