La Fiscalía Provincial de Castellón solicita una pena de seis años y nueve meses de prisión y una multa de 1.500 euros para un hombre de origen pakistaní por los presuntos delitos de agresión sexual en grado de tentativa, exhibicionismo, coacciones y dos delitos leves de lesiones.

El juicio por unos hechos que supuestamente se cometieron en febrero del pasado año en la capital de la Plana se celebrará en la Sección Primera de la Audiencia el próximo día 22 de noviembre.

Según sostiene el Ministerio Público en su escrito de acusación provisional, el hombre invitó a dos personas -una menor y un varón mayor de edad- a los que se encontró por la calle a subir a su vivienda. Una vez en el interior, aprovechando el momento en que la adolescente entró al baño, se aproximó al chico, que se encontraba en el sofá y le enseñó los genitales. Le conminó, según el mismo escrito, a que le realizara una felación, cogiéndole fuertemente del pelo y la mandíbula para conseguir su propósito.

El chico se resistió y el acusado no consiguió su objetivo, por lo que cuando la menor salió del lavabo se volvió a bajar los pantalones y comenzó a masturbarse. La chica cogió el teléfono para intentar llamar a su madre, momento que el procesado aprovechó para arrancarle el terminal de las manos y lanzarlo contra la pared. A continuación se inició un forcejeo entre ambos en el transcurso del cual el acusado le propinó a la menor empujones y codazos, según la Fiscalía.

El adulto llegó, según el mismo relato, a lanzarle una silla a la adolescente, que sufrió lesiones en los nudillos de las manos.

El otro joven allí presente intervino en la disputa y también se llevó golpes y empujones que le causaron eritemas, dolores musculares y contusiones.

Tras los referidos hechos, las dos víctimas consiguieron salir de la vivienda, siendo perseguidos por el acusado, quien empujó a la menor por las escaleras, según sostiene el Ministerio Fiscal.

Indemnización 

Además de la pena de prisión y la multa, la Fiscalía propone una indemnización de 170 euros para el varón por las lesiones sufridas. Por lo que respecta a la adolescente, pide el pago de 300 euros por las lesiones y otros 117 por el terminal telefónico roto.

Tras su salida de prisión, en caso de condena, el Ministerio Público aboga por la imposición de la pena de libertad vigilada consistente en el sometimiento a un programa formativo en materia de educación sexual por tiempo de seis años adicionales.

El juicio comenzará el día 22 con la declaración del acusado, que puede negarse a responder a las preguntas o, por el contrario, ofrecer su versión.