DURANTE UNA COMIDA PRENAVIDEÑA

Logra salvar la vida tras atragantarse en un restaurante de Castelló

Dos patrullas de la Policía Local y dos ambulancias acuden al lugar

Imagen de una persona realizándole a otra la maniobra de Hemlich

Imagen de una persona realizándole a otra la maniobra de Hemlich / MEDITERRÁNEO

Dos ambulancias y dos patrullas de la Policía Local de Castellón asistieron el miércoles por la tarde a un hombre de unos 65 años que estaba atragantándose en un restaurante de la avenida Casalduch de la capital y que, por suerte, pudo salvar la vida. El cliente celebraba una comida previa a las fiestas navideñas en el establecimiento cuando notó que un trozo de comida se le quedaba atravesado y no podía respirar.

Rápidamente, se dio aviso a los equipos de emergencias, que llegaron al lugar en escasos minutos. Los efectivos dieron agua al comensal, al que invitaron también a toser y a beber agua. El hombre estuvo consciente en todo momento y tuvo la capacidad de hablar los miembros del equipo sanitario, aunque insistía en que notaba el pedazo de comida todavía alojado.

Por ello, le insistieron en que intentara vomitar y, posteriormente, lo trasladaron a un centro médico para una revisión.

¿Cómo actuar en un caso similar?

Si la víctima del atragantamiento puede toser, lo mejor es no intervenir para dejar que el reflejo natural de la tos haga su trabajo. En contra de lo que muchas personas creen, los expertos dicen que es muy importante no palmear la espalda de la persona atragantada si está de pie o sentada, pues el cuerpo extraño podría desplazarse aún más adentro. Si la víctima no puede toser, habrá que recurrir a la maniobra de Heimlich o la persona podría morir de asfixia en pocos minutos.

Imagen de la maniobra de Heimlich

Imagen de la maniobra de Heimlich / MEDITERRÁNEO