MAL ESTRENO DEL AÑO

Estupor en la Vilavella: atropella a su vecino y se encierra en casa durante horas

El resto de residentes abandonaron el edificio buena parte de la tarde. Cuando regresaron el agresor todavía estaba en el interior

Edificio en el que se produjero el atropello intencionado en la Vilavella

Edificio en el que se produjero el atropello intencionado en la Vilavella / MONICA MIRA

X.Ortiz

El año ha empezado con un suceso que ha quebrantado la tranquilidad habitual de la Vilavella y ha provocado gran inquietud y preocupación. Un individuo atropelló este domingo a uno de los vecinos del edificio en el que reside y después se encerró en su piso durante horas hasta que, al salir por su propio pie, se vio sorprendido por la Guardia Civil, que lo esperaba.

Sería difícil precisar el origen del suceso, porque el presunto agresor lleva viviendo de alquiler un mes en el inmueble de la calle El Molinet donde se produjo ayer el atropello, y la convivencia, como ha podido saber Mediterráneo de fuentes próximas al caso, ha sido muy complicada desde el primer momento, aunque este último incidente ha marcado un peligroso punto de inflexión que ha acabado con una persona en el hospital.

El alcalde, Sebastià Roglà, explicó poco después del incidente que, al parecer, el desencadenante del atropello fue la agresiva actitud del sujeto, que comenzó a golpear el buzón de la comunidad. Desde una ventana, uno de los vecinos lo increpó, tuvieron un intercambio de palabras. El segundo bajó a la calle. En ese momento, el agresor estaba en su coche, aceleró y lo embistió contra la puerta de una cochera. Tras el atropello, se subió a su piso y se encerró en el interior abandonando al herido, que en primera instancia fue atendido por la Policía Local de la Vilavella y después por medios sanitarios que lo trasladaron hasta el hospital con heridas graves al menos en una pierna.

Roglà detalló que el agresor «no contestaba al teléfono, ni a la puerta», por lo que los agentes de la Guardia Civil desplazados al lugar de los hechos se quedaron haciendo guardia a la espera de que saliera por su voluntad o de que una orden judicial les permitiera entrar en su vivienda para proceder a la detención por lo que, atendiendo a los detalles del suceso, podría considerarse un delito de intento de homicidio. Poco después de las siete y media de la tarde volvió a aparecer en la calle como si nada hubiera sucedido. Los agentes que lo esperaban lo interceptaron.

Un mes de quejas

Este periódico ha podido saber que las quejas vecinales desde que esta persona llegó a la Vilavella y alquiló un piso en este edificio de 14 viviendas se han reproducido de manera constante. Especialmente por ruidos, música fuerte, golpes y molestias similares. Por poner solo un ejemplo, este mismo domingo por la mañana, según han relatado personas consultadas, se dedicó a lanzar excrementos de perro a la fachada.

Preocupación entre los vecinos por si ingresará en prisión o será puesto en libertad y podrá volver al piso

Tras el atropello, sobre las 14.00 horas, los vecinos del edificio abandonaron sus casas alarmados por lo sucedido. Horas después regresaron todavía asustados, porque el sujeto todavía estaba en el interior. Las agentes de la Guardia Civil les aconsejaron vivir con normalidad. Algo complicado tras lo que había pasado. Su preocupación ahora es si ingresará en prisión por la brutal agresión a su vecino o será puesto en libertad, aunque sea a la espera de juicio, lo que supondría que podría volver al inmueble residencial que comparten, donde vive su víctima y numerosas familias, pese a lo sucedido.