COCHES PATRULLA DESTROZADOS

El fugado de la peligrosa persecución de Almassora no puede ser detenido: es un niño de menos de 14 años

Está identificado y localizado, pero en España se es inimputable por debajo de esa edad

Imagen del estado en el quedó uno de los vehículos de la Guardia Civil de Almassora.

Imagen del estado en el quedó uno de los vehículos de la Guardia Civil de Almassora. / MEDITERRÁNEO

La Guardia Civil ha conseguido localizar e identificar a uno de los dos ocupantes del vehículo que en la madrugada del pasado jueves se dio a la fuga de un control, iniciando una peligrosa persecución en la que acabó provocando un accidente y embistiendo a varios coches patrulla. Según ha podido saber Mediterráneo de fuentes fidedignas, el suspodicho no ha sido detenido y el motivo no es otro que su edad. Se trata de un niño que tiene menos de 14 años y que, por tanto, es inimputable en España. Y es que, según el artículo 3 de la Ley 5/2000 reguladora de la responsabilidad penal del menor, cuando el autor de un supuesto delito sea menor de esa edad, no se le exigirá esa responsabilidad. Se le aplicará el Código Civil, es decir, responsabilidad civil para los padres del autor.

Este adolescente fue el que logró escabullirse de los agentes de la Benemérita y los policías locales tras el brutal choque en la calle José Ortiz, muy cerca del cruce con la calle Boqueras. La persona que lo acompañaba, que sí era mayor de edad, fue interceptada en la calle Juan de Austria, en la zona de Botànic Calduch, e inmovilizada en el suelo. Se enfrentará a un delito contra la seguridad vial y otro de daños por los destrozos realizados a los vehículos, que tuvieron que ser recogidos con grúa.

Cuatro meses sin respuestas

Esta no es la única persecución registrada en Almassora en los últimos meses tras dar esquinazo a un control de la Guardia Civil. Cabe recordar que hace cuatro meses otra fuga acabó de la peor forma posible: con una persona atropellada y fallecida.

Nicolás, de 27 años, falleció trágicamente después de haber salido del trabajo, mientras se dirigía a una oficina bancaria para hacer una gestión antes de comer en su casa, donde su padre preparaba la comida. Sin embargo, sin esperarlo, fue arrollado por un coche que circulaba a gran velocidad.

Si bien es cierto que el ciclista circulaba en dirección contraria, también lo hacía el varón que lo arrolló, sin después detenerse.

El suceso se produjo en la intersección de las calles Caridad y Juan de Austria. Los agentes de la Guardia Civil perseguían al autor del atropello tras no obedecer al alto. Los efectivos intentaban dar caza al conductor del Opel Astra.

Tras el fatal arrollamiento, la víctima salió despedida varios metros. El impacto fue mortal y nada pudieron hacer por salvar su vida. También voló varios metros su bicicleta, que golpeó a un testigo, provocándole lesiones.

El conductor del coche huido aún no ha sido detenido.