Usain Bolt es un apasionado de la música y lo demuestra en sus carreras cuando se marca unos pasos de baile. El Relámpago lo hizo en Berlín para festejar sus éxitos y repitió ayer en la principal estación de Zúrich, horas antes de su primera carrera tras el Mundial. Firmó autógrafos y deleitó como disc jockey a unos 3.000 fans.