Nuestro cuerpo necesita la radiación del sol para sintetizar la vitamina D, que contribuye de forma positiva al buen estado de los músculos, el sistema nervioso y el sistema inmunitario, entre otros. No obstante esta radiación también puede acarrear perjuicios irreparables en nuestra salud. Para evitar lesiones y patologías es necesario protegerse correctamente.

Decálogo de la AEMPS (Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios)

-      La exposición excesiva al sol es un peligro importante para la salud, aunque se apliquen fotoprotectores altos.

-      Evitar la exposición solar entre las 12 y las 16 horas.

-      No exponer al sol a niños menores de tres años. Protegerles con ropa, sombreros, gafas y protectores solares de Factor de Protección Solar (FPS o SPF, por sus siglas en inglés) alto, que sean especiales para niños y también resistentes al agua.

-      Utilizar un protector solar que proteja, al menos, frente a la radiación UVB (frecuentemente indicada como FPS), causante de las quemaduras solares, y UVA, principal responsable del envejecimiento prematuro de la piel.

-      Elegir un protector solar adecuado para cada tipo de piel o zona del cuerpo (crema, spray, leche o gel), teniendo en cuenta el fototipo.

-      Leer atentamente las instrucciones del producto y aplicarlo siguiendo el modo de empleo indicado, siendo especialmente relevante en el caso de productos en bruma y spray. No utilizar protectores solares que estén abiertos desde el año anterior.

-      Extremar las precauciones en las partes del cuerpo más sensibles al sol: la cara, el cuello, la calva, los hombros, el escote, las orejas, las manos y los empeines.

-      Utilizar protector solar incluso en días nublados.

-      Proteger, además, la piel con ropa (camisetas y pantalones), la cabeza con sombreros y los ojos con gafas de sol, de la radiación solar. Hidratarse bebiendo agua con frecuencia y aplicarse crema hidratante tras la exposición al sol.

-      Ante cualquier cambio de color, forma o tamaño de manchas o lunares, consultar con un especialista.

Cuidarse tanto por fuera como por dentro

Hidratarse con frecuencia, no realizar actividades exhaustivas en horas de mucho calor, llevar una alimentación saludable y equilibrada, evitar el estrés innecesario y dedicarse un poco de tiempo a uno mismo son solo algunas de las muchas cosas que se pueden hacer en verano, para relajarse y obtener beneficios para la salud.

Palasiet Thalasso Clinic & Hotel es un lugar en el que puedes llevar a cabo todo lo mencionado anteriormente. Con una filosofía basada en la salud y el bienestar, pone a disposición de los usuarios una extensa oferta de relajación y antiestrés, como escapadas de bienestar en las que podrás disfrutar de los beneficios de la talasoterapia.

Conoce y disfruta de sus instalaciones y, sobre todo, vive del verano en condiciones óptimas.