Violeta Mangriñan se encuentra en su mejor momento profesional con cientos de planes en su agenda, pero lo cierto es que la influencer no hay nada que desee más que estar al lado de su hija Gala. La vida de la influencer dio un giro de 180 grados el pasado 31 de julio cuando se convirtió en mamá y desde entonces, asegura que retomar proyectos profesionales que supongan estar cerca de su pequeña le cuesta mucho.