Compras menos abundantes y pocos caprichos. La subida de precios se nota en la cesta de la compra. Se buscan ofertas y se comparan precios. Las familias ajustan el presupuesto para poder llenar la nevera. En casa de Carmen son cuatro bocas las que alimentar. Araceli y José Luis son pensionistas y optan por los productos más baratos. La inflación no solo se nota en la cesta de la compra. Se prescinde más del coche, se viaja menos, se compra menos ropa y no gastamos tanto en comer fuera de casa. El dinero va para lo imprescindible.