Con abrazos y llantos desconsolados en la concentración a las puertas del ayuntamiento de Alovera, en Guadalajara. Así han despedido a Nicoleta Clara, de 41 años, asesinada anoche en su domicilio con un arma blanca por su pareja, de 54. Él mismo confesaba el crimen en una llamada a los servicios de Emergencias, tal y como ha confirmado este domingo la subdelegada del Gobierno en la provincia, Mercedes Gómez. Las discusiones entre ambos, según los vecinos, eran constantes en el piso, que compartían desde hacía dos meses, en camas distintas, tras varias separaciones. Sobre él no pesaba ninguna denuncia previa ya que ella, cuentan sus allegados, no llegó a hacerlo por miedo. Con Nicoleta Clara ya son 15 las mujeres asesinadas por sus parejas en lo que llevamos de año, además de dos menores de 7 y 10 años. En los últimos 20 días, desde el fin del estado de alarma, se han registrado 8 de estos 15 asesinatos machistas. Como el de Katia, arrojada al vacío por su pareja en Zaragoza. O María Teresa, asesinada con una escopeta por su marido en Asturias. Como Betty, en Tarragona, también con heridas mortales por arma de fuego. O Lucía, encontrada muerta por su hijo de 13 años tras ser asesinada por el padre del pequeño. Lo mismo que Warda, embarazada y asesinada junto a su hijo de siete años en Sa Pobla por el padre de ambos tras múltiples denuncias por malos tratos y una orden de protección que había expirado.