Chalecos antibalas, casos y armas de guerra. Se lo muestran a los estudiantes de Kharkiv, una ciudad ucraniana situada a 40 kilómetros de la frontera con Rusia. “Es muy raro hacer todo esto delante de mis amigos en el colegio”, cuenta una joven. Realizan también simulacros de evacuación mientras el país se prepara para un posible ataque por parte del ejército ruso. “Hemos comenzado a realizar esos simulacros para niños con más frecuencia”, dice un especialista en defensa civil. Le enseñan municiones y explosivos para que se den cuenta de lo que puede pasar, afirma. Clase de guerra en el salón de actos y también en el patio.