La princesa Leonor y su hermana, la infanta Sofía, han llegado este domingo, pasadas las 5 de la tarde, al Museo Dalí, de Figueres, cuyos accesos estaban abiertos al público pero controlados por un amplio despliegue de Mossos d’Esquadra, sin que se hayan producido incidentes pero si entre muestras de apoyo de ciudadanos convocados por asociaciones constitucionalistas y también de rechazo por parte de un grupo de independentistas. Las hermanas han llegado al museo, donde les han recibido la ministra de Educación, Pilar Alegría, y la delegada del Gobierno en Cataluña, María Eugenia Gay.

Se trata de la tercera visita de la princesa Leonor a Cataluña y la primera a Girona. Lo han hecho las hermanas sin la presencia de sus padres, que se incorporarán mañana a los actos convocados por la Fundación Princesa de Girona, que tendrán lugar en el palacete Albéniz de Barcelona.

En esta ocasión no ha participado ningún miembro de la Generalitat por su veto a los actos que organiza la Casa Real en Cataluña. Al plante se ha sumado la alcaldesa de Figueres, Agnès Lladó, de ERC, quien ha expresado su rechazo a la presencia de la heredera al trono en la localidad, donde gobierna en coalición con el PSC, Guayem y Canviem Figueres.