No se recuerda una tragedia igual en el Canal de La Mancha. Al menos 27 migrantes han muerto en un intento de llegar al Reino Unido. Una escalofriante cifra que podría aumentar en la próximas horas, porque todavía se busca a posibles supervivientes. Iban a bordo de una embarcación precaria. No se sabe ni sus nombres, ni de dónde venían, pero sí que entre las víctimas había cinco mujeres y una niña. Sin duda, una dura llamada de atención de la gravedad de esta crisis migratoria. Por eso, Boris Johnson convocaba de urgencia a su gabinete. Y, por su parte, Emmanuel Macron, pedía una reunión con varios ministros europeos relacionados con la migración. Ambos se responsabilizan mutuamente. Johnson cree que Macron no ha estado a la altura porque "su operativo en las costas no ha bastado". Y desde París buscan una actuación comunitaria. Consideran que "la respuesta también debería venir de Gran Bretaña". Lo que urge es buscar rutas seguras y legales para evitar que el mar se cobre más muertes.