Tras 4 días de despedidas, sacan el féretro del vestíbulo de Westminster. Lo cubre el estandarte real, corona, cetro y flores rosas. A hombros, 8 miembros de la Guardia Real lo llevan al carruaje de más de un siglo, tirado por un centenar de marineros.

Cortejo fúnebre, los 4 hijos y 2 nietos de la reina a la cabeza. 10 minutos a pie con músicas de gaiteros. Y otra vez a hombros hasta la histórica Abadía, lugar clave para la difunta. Porque en este bello edificio gótico, corazón para la monarquía británica, se casó Isabel II con el príncipe de Edimburgo en 1947 y 6 años después, fue coronada reina. Funeral de Estado, familia real al completo, incluidos 2 niños: Jorge y Carlota, los hijos mayores del Príncipe Guillermo. Más de una hora de servicio religioso con lecturas, cánticos y mucha emoción. Todos en pie cantando a la reina que reinó 70 años. Y tras la solemne ceremonia. 2 minutos de silencio en todo el país. Himno británico, más gaitas y último recorrido a pie por el centro de Londres.