Los concejales José Abad (PSOE) y Álvaro Escorihuela (Esquerra Unida) le pidieron ayer explicaciones al alcalde de Vila-real, Manuel Vilanova, por los cambios en el diseño del desvío que antes contemplaba dos rotondas y por los numerosos accidentes que se han producido.

Vilanova explicó que el cambio ha sido positivo y que la rotonda tiene el suficiente diámetro para absorber el tráfico. "Los accidentes que ha habido son de vehículos que iban a gran velocidad y ahora se han colocado bandas para reducir la velocidad", añadió. Sin embargo, sí que reconoció que hay que subsanar el acceso a la

N-340 desde la rotonda pequeña ya que no hay vial de aceleración y es peligroso.

El pleno rechazó una moción del Bloc en contra de la reducción del horario del valenciano en educación y aprobó una de EU sobre la instalación de contenedores de papel en dependencias municipales.