Acabar con la suciedad y los excrementos de perros en las calles y parques es el objetivo de la campaña que acaba de iniciar la asociación de vecinos del barrio del Pilar, con la colaboración de las concejalías de Medio Ambiente y de Servicios Públicos.

Esta es, según indicó la edila del área medioambiental, Ana Martín, la primera campaña conjunta de estas características, mediante la cual se quiere "establecer las pautas para que el barrio se mantenga limpio".

"El Ayuntamiento se compromete a hacer un esfuerzo para que esté todo preparado para llevar a cabo la iniciativa y solo hará falta la colaboración de los vecinos", añadió Martín.

Por su parte, el presidente de la entidad vecinal, Ángel Marcilla, pidió a los responsables municipales que estas campañas "se acompañen, una vez finalizadas, de las correspondientes sanciones a los infractores", para lo cual considera necesaria una mayor presencia policial que, después, se traduzca en multas para quienes no respeten las normas de limpieza pública.

Mientras, el secretario de El Pilar, Honori Planell, destaco que "no se trata de limpiar el barrio sino de no ensuciarlo". Asimismo, dijo que se le ha transmitido a la delegación de Medio Ambiente y al departamento de Gestió d´Obres i Serveis (GDOS) los puntos en los que los responsables vecinales consideran que debería haber más contenedores de recogida selectiva, así como también de basuras orgánicas.

La campaña se extenderá hasta mediados de noviembre, momento en el que se hará una primera valoración de los resultados, y acabará definitivamente en diciembre. "Esperamos que algo se note", indicó Planell.

La edila Martín aseguró que, durante la iniciativa y también al acabar la misma, habrá una vigilancia "exhaustiva" del área y "habrá sanciones" para quienes inclumplan la normativa.

Asimismo, los representantes vecinales pidieron a Martín que los contenedores de recogida selectiva se recojan con mayor asiduidad, especialmente los destinados a papel y envases ligeros.

A este respecto, y sobre el uso continuado de este tipo de contenedores por parte de algunos establecimientos, en especial los chinos, la concejala afirmó que "ha habido sanciones", aunque reconoció que el Ayuntamiento de la ciudad, en estos casos, está muy limitado "porque no les importa pagar las multas, por elevadas que estas sean".