El Ayuntamiento de Vila-real invertirá 1,3 millones de euros en diferentes mejoras de la red de abastecimiento de agua potable de la ciudad, destinadas a garantizar el suministro a las nuevas áreas de urbanización de la zona noroeste, de manera especial al área residencial del Madrigal.

La principal obra que se prevé realizar es la construcción de una nueva balsa de 2.000 m, que sustituirá a la existente en el Pou d´Amorós de la que, meses atrás, se desprendió buena parte del techo, por lo que las autoridades han decidido construir un nuevo depósito, al que se sumará una estación de bombeo.

Según fuentes municipales, los trabajos se financiarán en base al canon que se cobran en los recibos del servicio de agua potable, "por lo que no habrá que realizar ninguna inversión con fondos de otras partidas".