Para muchos, incluidos sus padres, "ha sido un milagro", por cuanto salir con tan solo unos rasguños de un incidente como el protagonizado por un joven vila-realense de 16 años "es lo mínimo que le podía haber sucedido", según han asegurado a Mediterráneo fuentes de la Policía Local de Vila-real.

El pasado sábado, en torno a las 17.45 horas, un aviso al 112 alertó de que un muchacho que estaba junto a algunos amigos en el Assut del Termet --una pequeña presa existente en el Millars, justo cuando el río bordea el pinar del paraje natural-- fue literalmente succionado por uno de los sifones que absorben el agua y la conducen por una acequia hasta el pantanet de Santa Quiteria.

Según ha explicado a este rotativo uno de los agentes que participaron en el rescate del joven, "este consiguió agarrarse a una escalera metálica que existe dentro de la caseta del sifón y logró permanecer a salvo hasta que los bomberos pudieron abrir una puerta metálica y sacar al chico".

Ante la posibilidad de que tuviera heridas de consideración, la Policía Local no dudó en requerir la presencia de una SAMU, cuyos profesionales descartaron, tras atenderle, trasladar al accidentado al hospital.

Los agentes consiguieron calmar al joven, mientras los bomberos realizaban las labores previas al rescate del menor.

"Cuando su padre llegó a la zona se emocionó mucho, al ver que su hijo solo presentaba heridas leves y pensando que el desenlace podría haber sido otro si el muchacho no hubiera logrado agarrarse fuerte a la escalera metálica", manifiesta uno de los policías que intervino.

Al final, afortunadamente, todo quedó en un gran susto.