La adecuación de infraestructuras idóneas para las industrias, la creación de locales públicos multifuncionales y centros juveniles para fomentar las relaciones sociales o una red de espacios verdes en los que la acequia actúe como conector son algunas de las necesidades que debe cubrir Vila-real de aquí al 2023, según representantes empresariales, políticos y sociales del municipio. Al menos eso es lo que se desprende del informe de resultados del taller que se realizó el pasado mes de junio, en el marco de la Agenda 21 Local, y en el que participaron técnicos profesionales, representantes de asociaciones vecinales, empresarios y políticos de Vila-real.

Por su parte, la concejala de Medio Ambiente, Ana Martín, se mostró satisfecha con las conclusiones, ya que, según explicó, "podemos decir que el Ayuntamiento ya cumple con el 70% de las necesidades que la población cree que debe tener la ciudad".

Y es que el documento incluye objetivos como la peatonalización del centro; la creación de un plan de movilidad que permita y facilite la utilización de transportes públicos; una mayor protección del río Mijares y su entorno; y la protección de la zona rústica frente a la especulación urbanística para evitar su abandono y desaparición, ya que el 91% del término es vegetación agraria, básicamente dedicada al monocultivo de cítricos (85,9%), y debe ser bien ambiental.

En este sentido, Martín dijo que son proyectos en los que está trabajando el consistorio. Y es que, tal y como recordó la edila, "en cinco meses, el centro urbano se ha transformado con la peatonalización de las calles. Además, nos han concedido un servicio de préstamo de bicicletas y estamos trabajando en el tema de la protección agraria".

PLAN DE ACCIÓN La edila avanzó que "en breve, tendremos un conjunto de medidas correctoras con las que satisfacer al 100% las necesidades de los vila-realeneses y mejorar la calidad de vida de la población".