El alcalde de Vila-real, Juan José Rubert, afirma estar trabajando para conseguir importantes mejoras alrededor de este proyecto y justifica el retraso que sufren las obras apuntando a la "complejidad" que tienen.

Según el primer edil, "el proceso constructivo es tremendamente difícil, por lo que podría acumularse un pequeño atraso, pero la información que nos llega es que los trabajos avanzan".

"Lo que nosotros hacemos es adelantarnos exigiendo toda una serie de cuestiones necesarias, como disponer de la ronda suroeste, así como urbanizar una parte de la travesía del camino de Betxí, dos entradas naturales al centro desde otras ciudades colindantes".