Era una operación sencilla y el doctor Gastaldi la ejecutó a la perfección. Santi Cazorla ya está en casa después de pasar en la mañana de ayer por el quirófano en el Hospital Nou d’Octubre de Valencia. ¿La causa? Se le retiró una placa de titanio del peroné de su pierna derecha que tenía desde que se lesionó en la temporada 2008/09 en el campo de Almería y que le provocaba molestias.

La operación duró poco menos de 30 minutos y tras la misma comienza un periodo de rehabilitación en el que el futbolista tendrá que estar dos o tres semanas en reposo, para recuperarse totalmente de las molestias y ponerse las pilas ante la próxima Liga.

SIN PRISA, PERO SIN PAUSA // El equipo vuelve al trabajo el próximo 12 de julio y Santi Cazorla estará ahí. Sin embargo, no se quieren correr riesgos con el jugador y por eso no comenzará a trabajar al mismo ritmo que sus compañeros, sino que seguirá un plan específico para poder llegar al comienzo de la temporada al cien por cien. Está previsto que la operación no deje ninguna secuela en el jugador, sino al contrario, pues el asturiano pasó por el quirófano porque no se sentía cómodo desde que tenía implantada esta placa de titanio en el peroné. A partir de ahora su pierna derecha tendrá que asimilar este nuevo cambio y después podrá pasar por fin página a la lesión.

El futbolista ha vivido un año negro en el apartado médico, pues a la fractura del peroné de su pierna derecha hay que unir la hernia discal que le ha impedido contar la pasada campaña con la regularidad que era habitual en él. Sin embargo, esta última dolencia parece estar ya olvidada, pues el jugador asturiano realiza a diario los ejercicios necesarios para ello y tras pasar por el quirófano el pasado mes de febrero la mejoría ha sido evidente.

Santi Cazorla es el primer interesado en volver a ser la piedra angular por la que pasa el fútbol de los amarillos y se han dado los pasos necesarios para que en la próxima temporada repita los números que firmaba hasta sufrir las dos lesiones.